Creación de identidad corporativa
En PROFESIONALNET sabemos que la identidad de tu empresa debe estar bien definida y ser reconocible, de lo contrario pasará desapercibida o, peor aún, será fácilmente olvidada.
¿Cómo se gana un lugar especial en la mente (y el corazón) de tus clientes? Construyendo una identidad corporativa duradera.
Para ello, es necesario crear una imagen corporativa impactante, reconocible, fácil de recordar y que se distinga por soluciones gráficas coherentes con el color.
El nombre y el logotipo son los puntos de partida esenciales en este proceso. Por supuesto, no se puede hablar de una marca sin llamarla por su nombre y no basta con asociarla con detalles gráficos, se necesita algo más.
Este plus viene dado por un conjunto de elementos que investigan la empresa en sus aspectos más íntimos como su historia, valores, misión y visión que la distinguen.
La identidad corporativa cuenta una historia, pero no cualquier historia, sino la de tu empresa, desde un punto de vista más profundo, sin relación con el producto o servicio en sí. Separado del contexto, ayuda a diferenciarse de la oferta de tus competidores porque es único y nadie más puede contarlo por ti.
Una empresa está formada por personas, empleados y clientes, que comparten un conjunto de valores y creencias que son los pilares de la marca. Tienes que ponerlos en el centro de tu comunicación y hacer que contribuyan a la difusión y refuerzo de estos valores relacionados con el propósito de tu empresa.
La imagen positiva de tu marca depende de la coherencia del mensaje y también de la forma en que se transmite en los distintos canales digitales.
Al comunicar tu identidad online es importante ser claro e interesante para atraer la atención y estimular conversaciones fructíferas en torno a tu marca para aumentar tu credibilidad.
Identidad corporativa: qué es, cómo conseguirla
¿Ha oído hablar alguna vez de la identidad corporativa? aunque esta terminología es bastante común en el sector, no todo el mundo sabe realmente lo que significa.
Hay algunas ideas bastante confusas al respecto, por lo que hemos pensado en elaborar una pequeña guía para construir tu identidad corporativa.
Identidad corporativa: cómo crearla
Para conseguir construir y comunicar la identidad corporativa de forma inequívoca y eficaz, es importante elegir cuidadosamente los recursos para hacerlo.
Entre ellos, están sin duda los medios de comunicación que hay que utilizar: la página web, los canales sociales y los blogs, por ejemplo, tienen una importancia fundamental para comunicarse en la red con sus clientes.
Al mismo tiempo, también es importante definir las directrices corporativas para la comunicación, así como las palabras clave que se utilizarán para transmitir el mensaje que se desea a los usuarios.
Así que vamos a tratar de entender cómo definir tres de los elementos que ayudan a los clientes a tener una percepción correcta de la personalidad de la empresa: la imagen corporativa, la comunicación corporativa y el lenguaje corporativo.
¿Qué es la identidad corporativa?
Definir lo que es la identidad corporativa no es en absoluto sencillo. Como ya se ha mencionado, es un concepto bastante complejo, que tiene que ver con la historia, la misión y la visión de una empresa.
Consiste en la representación de la personalidad de la empresa tanto a través de imágenes (logotipo, envase, colores institucionales…) como de métodos de comunicación específicos.
Más concretamente, es la representación de la concepción específica que una marca tiene de sí misma y quiere comunicar a su público. Así, la historia, los valores y la oferta se refieren a los usuarios de forma clara e inequívoca, elegida precisamente en función de la identidad corporativa.
De este modo, cada elemento de la comunicación de la empresa, desde los gráficos del sitio web hasta la forma de hablar, refleja plenamente la personalidad de la propia marca.
Los usuarios, por tanto, tendrán una percepción muy clara y real de la empresa a la que acudirán para cualquier servicio o producto. Suponiendo que la Identidad Corporativa haya sido bien construida por el departamento de Marketing, y no sólo eso.
Sin embargo, para aclarar esta definición, en PROFESIONALNET proponemos el modelo de Balmer y Soenen (1999), según el cual la identidad corporativa se compone de tres elementos diferentes:
Imagen corporativa
Este término se refiere generalmente a todos aquellos elementos visuales a través de los cuales una empresa se comunica externamente.
Los logotipos de la empresa, los colores corporativos, los envases, los tipos de letra, el mobiliario de la oficina y los colores de los uniformes de los empleados conforman la imagen corporativa, más conocida como la identidad corporativa de una empresa.
Este es, sin duda, uno de los elementos más importantes para una marca porque garantiza el reconocimiento inmediato por parte de los usuarios. Y, al mismo tiempo, transmite un mensaje corporativo importante y directo. Por lo tanto, trabajar en la creación de una imagen coordinada es extremadamente delicado. Todo comienza con el logotipo, que se considera a todos los efectos la representación perfecta de la personalidad de una empresa.
Por extraño que parezca, es el elemento visual que resume la historia, la misión y la visión de la empresa (por eso es tan difícil crear uno). Los colores y los tipos de letra son otros dos pilares importantes de la identidad corporativa.
Representan a la empresa tanto en la comunicación online como offline, por lo que adquieren una importancia fundamental en la relación con el usuario final.
De hecho, lo más importante es que estos elementos sean siempre coherentes entre sí, para garantizar una buena visibilidad y una reconocibilidad inmediata. Todos estos elementos se fusionarán para crear una imagen corporativa que se utilizará fuera de línea en tarjetas de visita, folletos, membretes, folletos, envases de productos y mucho más.
Comunicación corporativa y lenguaje
Por muy importante que sea, la imagen no es el único elemento que conforma la identidad corporativa.
Por supuesto, es muy importante transmitir la identidad corporativa de uno mismo visualmente, sobre todo porque los elementos visuales son los que más se quedan en la mente de los usuarios. Pero es igual de importante saber transmitir bien una imagen y acompañarla del mensaje adecuado.
Por lo tanto, cada comunicación debe respetar el lenguaje específico de la cultura corporativa para transmitir la información de forma correcta tanto a nivel interno como externo.
Este lenguaje también forma parte de la identidad corporativa, y debe ser cuidadosamente gestionado y controlado. Pero si pensamos en la comunicación hacia el exterior, es importante planificar una estrategia que transmita mejor los valores y las ofertas de la empresa.
Por ello, es fundamental hacer atractiva la imagen utilizada para transmitir un mensaje, o utilizar los testimonios de los empleados para dar a conocer la marca. De este modo, al construir una Comunicación Corporativa coherente con tu imagen corporativa, podrá transmitir al público tu Identidad Corporativa única y distinguible.